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Limfa F Limpiador quitacementos suave para interior 1l
Limpiador quitacementos suave y desoxidante de seguridad. Recipiente 1 litro LIMFA
Limfa F está recomendado limpiar restos de cemento, cal, óxido, eflorescencias y otras suciedades en superficies de:
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Barro, porcelánico, terrazo, monocapa, ladrillo, granito, mármol, piedra natural, piedra artificial, superficies cerámicas…
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Maquinaria de construcción.
Limpiador ácido no oxidante para superficies minerales.
Gran poder desincrustante.
Alto rendimiento.
Concentrado.
No oxidante.
Agradable aroma.
Uso en interior y exterior.
Limfa F es un limpiador ácido de seguridad y no oxidante, formulado con ácidos inorgánicos específicos y aditivos humectantes y de alta calidad que hacen de este producto un potente limpiador de cemento, sales y suciedad incrustada sobre todo tipo de superficies resistentes a los ácidos.
Así, Limfa F elimina restos de cal, cemento, eflorescencias, óxido, salitre y otras suciedades que no eliminan los limpiadores alcalinos habitualmente empleados, tanto en fachadas como en suelos rústicos.
Debido a su estudiada composición, Limfa F, no desprende vapores, por lo que puede utilizarse tanto en interior, como en exterior. Así mismo, su naturaleza no oxidante con los metales, permite que Limfa F sea el limpiador recomendado para aplicar en todo tipo de superficies delicadas resistentes a los ácidos, así como en todas aquellas superficies minerales en las que se integren con superficies metálicas. Por ejemplo: granito, pizarra, mármol no pulido, ladrillo cara vista, porcelánico, gres, barro cocido, piscinas de gresite y cloro-caucho, fuentes ornamentales, etc.
En base a su formulación, Limfa F está recomendado limpiar restos de cemento, cal, óxido, eflorescencias y otras suciedades en superficies de:
Barro, porcelánico, terrazo, monocapa, ladrillo, granito, mármol, piedra natural, piedra artificial, superficies cerámicas…
Maquinaria de construcción.
Limfa F es un producto concentrado, por lo que ha de diluirse antes de su uso. La dosificación del producto varía en función de la superficie, el tipo de suciedad a limpiar y la cantidad de ésta.
Para su empleo:
1 – Humedecer la superficie a limpiar con agua.
2 – Aplicar el producto puro o diluido (dependiendo del tipo de suciedad).
- Para valorar el tipo de dilución, se aconseja hacer una prueba previa a la utilización definitiva. Generalmente, la dosificación recomendada es de 1 litro diluido hasta en 5 litros de agua para suciedad media y ligera y de 1 litro diluido en hasta 2 litros de agua para suciedad más consistente.
3 – Dejar actuar unos minutos frotando en caso de ser necesario.
4 – Aclarar con abundante agua.
5 – En caso de ser necesario, repetir el proceso.